El Municipio de Monterrey ha planteado reformas ambientales en los reglamentos urbanos, pero las propuestas no incluyen la flexibilización de licencias de construcción, uso de suelo y edificación. Sin embargo, algunos residentes se oponen a estos cambios, alegando que afectarán al medio ambiente.
Cambios Propuestos Por el Municipio
El Secretario de Desarrollo Urbano Sostenible, Fernando Gutiérrez, aclaró que las reformas propuestas buscan agilizar los trámites de licencias de construcción. En lugar de permitir flexibilizaciones en los requisitos, la propuesta tiene como objetivo que los desarrolladores puedan tramitar la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) ante las autoridades estatales y federales mientras inician el trámite con el municipio.
Gutiérrez detalló que los desarrolladores no podrán comenzar a construir hasta que tengan el permiso de impacto ambiental y el permiso del municipio. La propuesta pretende evitar mayores retrasos en los trámites, ya que las autoridades federales y estatales tardan hasta dos años en emitir el resolutivo de la MIA.
El secretario destacó que esta propuesta no implica una reducción de los estándares ambientales, sino que busca agilizar los trámites para no retrasar aún más los proyectos de construcción en Monterrey. “Si se cuenta con el MIA y el permiso municipal, se construye. Si no, no se construye”, afirmó Gutiérrez.
Es falso que en Monterrey se podrá construir sin contar con permisos ambientales. ¡No se dejen engañar! pic.twitter.com/lcOQMJ9FDv
— Gobierno Monterrey (@mtygob) April 21, 2025
Oposición de Vecinos y Colectivos Ambientales
Sin embargo, las reformas han generado preocupación entre los residentes de al menos seis colonias de Monterrey. Vecinos de Loma Larga, Obispado, San Jerónimo, Vista Hermosa, Chepevera y Cumbres han comenzado a recolectar firmas para oponerse a los cambios en los reglamentos. Estos residentes temen que la eliminación de la MIA permita la construcción sin una adecuada evaluación ambiental, lo que afectaría el equilibrio ecológico en zonas sensibles de la ciudad.
Adrián Peña, presidente de la colonia Loma Larga, expresó su preocupación por los efectos de la reforma en áreas como Cumbres y San Jerónimo, que son zonas de terrenos accidentados y de importancia ambiental. Por su parte, Verónica Plaza, de San Jerónimo, denunció que la propuesta permitiría que los desarrolladores reciban permisos de construcción antes de completar la MIA, lo que dificultará la posible detención de obras que puedan afectar el medio ambiente.
Reacciones de la Administración Local
Desde el municipio, las autoridades han intentado calmar las preocupaciones de los vecinos, reiterando que las reformas están diseñadas para proteger al medio ambiente sin generar más burocracia.
El debate sobre estas reformas sigue abierto, y los próximos días serán cruciales para determinar si los vecinos podrán influir en los cambios propuestos por la administración del alcalde Adrián de la Garza. Los desarrolladores, por su parte, siguen aguardando una resolución que pueda facilitar la construcción, pero con un equilibrio con las necesidades de protección ambiental.